Detrás de “el príncipe” maquiavélico

Human Rights pidió a Argentina la detención del príncipe heredero de Arabia Saudita, que está en el país para participar del G-20 y está denunciado por torturas y asesinatos.

El fiscal federal Ramiro González requirió exhortos a Arabia Saudita y Yemen para que esos países informen si existen procesos judiciales contra el príncipe Mohammed Bin Salman por presunta violación a los derechos humanos.

El requerimiento fue presentado ante el juez federal Ariel Lijo frente al pedido de detención realizado por Human Rights Watchs, luego de que el príncipe heredero de Arabia Saudita arribara ayer a la Ciudad de Buenos Aires para participar de la Cumbre de Líderes del G-20.

“Entiendo la situación política que vive la Argentina en este momento, con el G- 20. Sería enorme hacer eso. La Argentina tiene ciertos compromisos con los derechos humanos. La Convención contra la Tortura y las de Ginebra obligan a un Estado en cuyo territorio se halla una persona que se supone que ha cometido tortura o crímenes de guerra que someta el caso a las autoridades”, advirtió el abogado de Human Rights, Reed Brody.

La organización Human Rights Watch espera la respuesta de la Justicia argentina al pedido de detención contra el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, en el marco de la investigación iniciada por el asesinato de un periodista disidente Jamal Khashoggi, asesinado el 2 de octubre en el consulado del reino en Estambul, Turquía. El periodista de The Washington Post fue simpatizante de la monarquía, pero se convirtió en crítico de Mohammed bin Salman y se autoexilió en Estados Unidos.

“Hemos presentado una denuncia ante la Justicia argentina y estamos a la espera de lo que va a responder. Hemos presentado la información sobre las atrocidades y violaciones al derecho humanitario, como ataques aéreos contra civiles, escuelas, hospitales y mezquinas; así como las torturas y el caso de Jamal Khashoggi, sobre el presunto rol del Príncipe”, sostuvo el abogado, en declaraciones radiales.

“La CIA tiene un alto grado de certeza de que el Príncipe ordenó personalmente el asesinato del periodista”, afirmó el letrado.

Es probable que antes de que el exhorto y el intercambio de información esté resuelto, el príncipe heredero de Arabia Saudita haya concluido su viaje a Argentina. De todos formas, la decisión de hacer lugar al exhorto puede generar un conflicto en las relaciones internacionales del país.

 

(Con información de NA)