“Una perdición de ruina y furia”, lo nuevo de Jennifer L. Armentrout, llega a las librerías argentinas

Se trata de la nueva novela de la autora de “De sangre y cenizas” y de la saga “Lux”

Jennifer L. Armentrout, la consagrada escritora de la saga “Lux”, “De Sangre y Cenizas” y otras novelas de fantasy romance, regresa a las librerías argentinas con una nueva novela. Se trata de “Una perdición de ruina y furia” en español- en donde se nos presenta a un mundo destruido por los dioses.

Según su sinopsis oficial:

Hace mucho tiempo, el mundo fue destruido por los dioses. Solo se salvaron nueve ciudades. Separadas por un vasto desierto repleto de monstruos y peligros inimaginables, cada ciudad ahora está gobernada por un guardián: la realeza que se alimenta del placer de los mortales.

Nacida con una intuición que nunca falla, Calista sabe que sus talentos son de gran valor para los hambrientos de poder del mundo, por lo que vive escondida como cortesana del barón de Archwood. A cambio de su protección, ella le otorga información.

Cuando su intuición la lleva a salvar a un príncipe viajero en graves problemas, la voz dentro de ella resplandece con una advertencia y una promesa. Hoy él le traerá alegría. Un día él será su perdición.

Cuando el barón se interesa por el príncipe viajero y el príncipe se interesa por Calista, ella se convierte en la compañera temporal del príncipe. Pero la ciudad hierve a fuego lento con la rebelión, y con caballeros y monstruos a las puertas de la ciudad y un príncipe hambriento en su cama, la intuición puede no ser suficiente para mantenerla a salvo.

Calista debe elegir: seguir su intuición hasta la seguridad o seguir su corazón hasta su ruina…

Así, Armentrout se prepara para renovar las credenciales que la convierten en una de las voces más leídas y aclamadas del género de fantasy romance. Los lectores argentinos ya podemos disfrutar de esta nueva historia de la reina del fantasy romance.

FICHA TÉCNICA DE LA NOVELA:

Título: “Una perdición de ruina y juria”

Autora: Jennifer L. Armentrout

Editorial: Puck