Ratifican el pedido de “captura internacional” de Martínez Rojas

El juez penal de instrucción Ángel Gabriel Nardiello dispuso el procesamiento por el delito de “uso de documento privado falso”.

El juez penal de instrucción Ángel Nardiello ratificó hoy el pedido de “captura internacional” del empresario Juan Mariano Martínez Rojas, prófugo de la Justicia y quien se propone como “arrepentido” en causas por corrupción durante el kirchnerismo.

El magistrado, quien investiga a Martínez Rojas en dos causas -una por estafa y otra por uso indebido de documento-, informó que la justicia trabaja “vía interpol” para lograr la detención del imputado.

Si bien señaló que se trata de dos delitos “de poca cuantía punitiva”, explicó que se suman al resto de las causas que enfrenta el empresario entre ellas una por “asociación ilícita y lavado de activos”.

En los últimos días, Martínez Rojas habló profusamente con la prensa desde Estados Unidos para sostener que la ex presidenta Cristina Fernández manejaba la Aduana, con lo que se comprobó que no estaba en el país y que no había notificado a la justicia argentina sobre su viaje al exterior.

Por eso, hoy en diálogo con radio Splendid el juez explicó que se actuó “en forma rápida e inmediata” y se pidió “la captura internacional en los dos casos”.
Martínez Rojas fue procesado en otra causa por haber utilizado un documento con una firma falsa de un contador para beneficiar impositivamente a una de sus empresas.

El juez penal de instrucción Ángel Gabriel Nardiello dispuso el procesamiento por el delito de “uso de documento privado falso”, que tiene una pena prevista de entre seis meses y dos años de prisión, y lo embargó por 15 mil pesos.

El empresario habría usado el documento con la firma apócrifa para presentarlo ante el Consejo de Ciencias Económicas de la Capital Federal “adulterando los estados contables de la firma ICHI SRL”, de acuerdo a las investigaciones.
Con ese nombre figura en los registros oficiales una empresa destinada a la industria textil, con un giro comercial de entre medio millón y un millón de pesos anuales y entre uno y cinco empleados, pero en la dirección registrada -en el barrio de Flores- hay una casa particular.