¿Lula podría recuperar la libertad? Un juez de la Corte Suprema lo propuso

El máximo tribunal brasileño analiza dos pedidos de habeas corpus presentados por la defensa del ex mandatario, preso desde 2017.

Un juez de la Corte Suprema de Brasil propuso hoy que el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva sea excarcelado hasta tanto sea definido si el juicio en el que fue condenado tuvo la “imparcialidad” que exige el estado de Derecho.

El autor de la propuesta es el juez Gilmar Mendes, quien integra la Segunda Sala del Supremo, que si bien lo había retirado de su pauta para este martes, decidió juzgar dos pedidos de “habeas corpus” presentados por la defensa del ex presidente, en prisión desde abril de 2017 y condenado por corrupción, informó el Supremo Tribunal Federal en su cuenta de Twitter.

La defensa del ex presidente y líder del Partido de los Trabajadores (PT) había cuestionado en diversas presentaciones la imparcialidad del juez Sérgio Moro, hoy ministro de Justicia del gobierno de Jair Bolsonaro, pero la reciente difusión de contactos entre el entonces magistrado y la Fiscalía consolida esos argumentos.

En un principio el Supremo había ubicado estos habeas corpus en el puesto número 17 de los temas a tratar, lo que en los hechos significaba que no sería analizado hasta agosto, luego de la feria judicial, pero ante un planteo de la defensa del ex presidente se resolvió avanzar hoy con el análisis de dos de esos habeas corpus.

Por otra parte, Lula acusó al ex juez Moro de “parcialidad” y de tener tomada la decisión de condenarlo “antes incluso de recibir la denuncia de los fiscales”, en una carta hecha pública hoy por la prensa.

“Mandó invadir mi casa y llevarme por la fuerza para declarar sin haberme citado nunca. Mandó intervenir mis llamadas telefónicas, las de mi mujer, las mis hijos y hasta las de mis abogados. Lo que es gravísimo en una democracia”, recuerdó el líder del Partido de los Trabajadores (PT) en el texto escrito en la cárcel de Curitiba, en el estado de Paraná, donde cumple su condena.

En 2017, Moro condenó a ocho años y 10 meses en primera instancia al ex mandatario por corrupción y blanqueo de dinero en el caso de un departamento en el municipio de Guarujá

(Télam)