En la apertura de sesiones del Congreso, Macri anunció el adelanto de la AUH

Con un discurso orientado a la campaña electoral de este año, Mauricio Macri destacó los avances institucionales y en infraestructura de su gestión y justificó el retroceso económico.

El discurso comenzó casi puntual, a las 11.02. Hubo aplausos, hubo insultos y abucheos, y hasta una “colada” en los palcos del recinto de la Cámara Baja, que al ser descubierta, fue echada por la presidente del Senado, Gabriela Michetti.

Durante la hora exacta que duró el discurso de apertura de la 137º Asamblea Legislativa, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, destacó la política exterior, energética, de turismo, de conectividad y de impulso a la industria y a las pequeñas y medianas empresas. También, la de seguridad, la de combate al narcotráfico, a la violencia de género, a la de lucha contra la corrupción y recuperación de las mediciones estadísticas. Cambió “lo peor ya pasó”, de los discursos pasados, por “estamos mejor que hace tres años”.

Al final, dejó inaugurada “oficialmente” la asamblea legislativa, la última de su período actual como presidente.

“Hoy, quiero convocarlos otra vez para proyectar nuestra Argentina a 30 años, sin oportunismos ni ventajas. Sólo así vamos a lograr un país para todos. Veo una Argentina con esperanza porque saben que no estamos poniendo parches, con una clara visión de futuro. Estamos parados sobre beses sólidas y estamos mejor que hacer tres años. Por eso les digo: vamos argentinos, vamos con fuerza, vamos con coraje y, juntos, vamos a sacar adelante a este país. Hoy les digo a los argentinos: a no aflojar, a no tirar la toalla. Nuestro tiempo es hoy, no dejemos que los predicadores de la resignación y el miedo le ganen a la esperanza”, fue el mensaje final del mandatario ante el Gabinete nacional, los miembros de la Corte Suprema, legisladores, gobernadores y embajadores, entre otros.

En el comienzo del discurso, Macri justificó la crisis del año pasado, que hizo retroceder a la economía y volver a avanzar en el índice de pobreza, y pidió “paciencia”.

“Nos propusimos cambiar nuestro país en serio, entendimos que nuestro país depende de nosotros y de nadie más. Y no hablo sólo de la herencia recibida, sino de años de no hacernos cargo de lo que nos pasa. Por eso, nos animamos a hacer lo que ninguna generación se animó a hacer. Cuando estábamos asomando la cabeza, cambiaron las condiciones, y todavía estábamos frágiles”, explicó. “Juntos, estamos construyendo cimientos más profundos. Los cambios profundos requieren paciencia. Muchos van a recordar que dije que lo peor ya pasó y no es así, y tienen razón”, continuó.

De esta manera, el presidente buscó reconocer el impacto de la crisis económica y la inflación en el empleo y la pobreza, pero volvió a refugiarse en la idea de que se están llevando a cabo “transformaciones profundas” que “llevan tiempo”. “Teníamos estructuras muy arraigadas. Lo que estamos haciendo no tiene vuelta atrás, ya no nos da todo lo mismo. Ya no creemos en las soluciones mágicas porque sabemos que las transformaciones profundas llevan tiempo”, explicó.

“Es necesario pensar por lo más básico y hoy podemos decir que la Argentina está mejor parada que en 2015. No significa que ya estamos donde queremos estar, sino que salimos del pantano. Que sea difícil no quiere decir que sea imposible”, agregó Macri.

El jefe de Estado destacó “los cambios en el ejercicios del poder” de su gestión.

“Queremos recuperar los bienes de la mafia y la corrupción y que cada uno diga donde está parado y a quién quiere proteger. Se acabó el tiempo donde los delincuentes se salían con la suya, mientras la mayoría trabajamos para sacar al país adelante. Hablo de un gobierno que respeta la independencia y la Justicia. Y todos tenemos que rendir cuentas, incluso la familia del presidente y el presidente. Se está acabando la impunidad y, en este sentido, también estamos mejor que en 2015”, sostuvo. “Hay un gobierno que trabaja en base al diálogo, que debate con disidencia pero con buena fe. Somos el primer gobierno en cien años que pasó todo su mandato en minoría y, aún así, logramos consensos”, destacó el presidente.

Macri llamó a “seguir avanzando” en la modificación del Código Penal y del Régimen Penal Juvenil, que el gobierno pretende que sea sancionado por el Congreso en los próximos días.

“Los argentinos estamos haciendo cambios profundos para no volver atrás nunca más. Hoy estamos resolviendo problemas que no son coyunturales, son estructurales”, sostuvo.

Anuncio sobre la AUH

Mauricio Macri asumió que la inflación “es el causante de la pobreza y del estancamiento del país”. “La pobreza no desaparece porque se deje de medir, porque se refleje una realidad maquillada, con un Estado que despilfarrara recursos. Lamentablemente, la pobreza ha vuelto a los niveles de antes”, admitió.

Al reconocer que “los chicos son los golpeados por la pobreza”, el presidente anunció la decisión de adelantar los incrementos previstos en la Asignación Universal por Hijo (AUH) a partir de este mes, por lo que el monto de marzo subirá un 46 por ciento.

Aunque no dio más detalles del anuncio, el mandatario dijo que espera que en este año se produzca una “baja sustancial de la inflación, que será un alivio para todos”.

En este punto, Macri destacó las obras en infraestructura de su gestión.

“No se es pobre sólo por lo que se gana a fin de mes. La pobreza también tiene que ver con al libertad y la dignidad perdida y empieza a bajar cuando se termina el uso político de los pobres, se cambia cuando se vive en un barrio popular, cuando la ambulancia puede entrar al barrio. Se cambia cuando, en las zonas más vulnerables, el Estado se acerca con información, educación y herramientas. Se cambia en serio cuando transparentamos los programas sociales. Hoy, el 86 por ciento de las personas que reciben un plan, estudian o se capacitan. Se cambia en serio cuando el Estado dice que la inseguridad no es una sensación y trabaja de forma federal para bajar la violencia en lo barrios”, apuntó.

Freno a los insultos

Mauricio Macri frenó los insultos y abucheos de los legisladores de la oposición en dos ocasiones. “Los gritos y los insultos no hablan de mí, hablan de ustedes”, disparó, lo que generó el aplauso y los apoyos de la platea oficialista.

“Vivir en democracia es escuchar y dialogar. Y estoy acá porque me votaron los argentinos”, agregó.