Tango Viva, el arte no espera

Una productora iba a lanzar el espectáculo de una compañía argentina de tango, dirigido por Lorena Goldestein y Cristian Gallardo, ex bailarines en los cruceros de la Royal Caribbean. El megashow internacional quedó a la deriva por la cuarentena. Como la inmensa mayoría de los trabajadores de la cultura, los artistas deshojan la margarita.

A fines de año pasado, Lorena Goldestein y Cristian Gallardo, dos coreógrafos y bailarines con 20 años de trayectoria en la danza, fundaron la Compañía Tango Viva. Inmediatamente, lograron la representación de la compañía internacional OZ Productions (ver aparte). Desde entonces, los artistas dirigen un show diferente, un espectáculo que, sin perder la esencia tanguera, transgrede al típico show “for export” para turistas.

Pero la pandemia del Covid-19 postergó su agenda 2020. La extensa tourné, programada para concretarse en los más prestigiosos teatros de Europa y Asia, se postergó hasta nuevo aviso. Para Lorena y Cristian, “el Tango siempre te sabe esperar”. Son pacientes, pero deshojan el almanaque y siguen, día a día, la evolución de la pandemia, ensañada especialmente con los espectáculos multitudinarios.

Antes de esto, la pareja viajó seis años por los mares del mundo contratada por la Royal Caribbean. Luego tuvo a su cargo, por un año, la dirección artística de “El Viejo Almacen”. De aquellas experiencias, ambiciosas e intensas, se sintieron listos para enfrentar un nuevo desafío: cautivar un público cosmopolita para hacerlos enamorar del Tango. Así, impulsados por la ilusión de causar ese hechizo, nació Tango Viva.

“Tango Viva es el grito de libertad y la necesidad de transmitir este maravilloso arte argentino. Es la forma de poner en música y movimiento el enigmático, apasionante, alegre, y adictivo mundo del Tango”, explica Lorena. “La opción es diferente porque es transgresora, atractiva y atrapa al espectador desde el inicio hasta el final del espectáculo”.
El show se caracteriza por su amplio repertorio musical: desde los tangos emblemáticos y representativos de nuestra historia, como la Cumparsita, hasta la adaptación al ritmo del 2×4 de obras míticas de Queen o Tchaikovski.

Bajo la dirección musical del reconocido maestro, el pianista, compositor y arreglador, Fernando Marzan, Tango Viva proyecta a su audiencia a un mundo de fantasía, mostrándonos temáticas actuales de nuestra sociedad y que no resultarán ajenas al ojo del espectador.

La pasión, la bronca, el egoísmo, la lujuria, la incomunicación, la desdicha, la felicidad y las diferencias sociales son sentimientos a flor de piel durante toda la obra.

Seis parejas de prestigiosos profesionales del tango danza entregan su corazón en cada interpretación, y la maravillosa María José Rojas canta una variedad de temas que exponen la argentinidad al cien por cien.

Oz Productions, la empresa con base en Londres que prepara la gira, produjo hace diez años un espectáculo donde bailaba Cristian Gallardo. Así decidió buscar a Tango Viva. Oz llegó a presenciar el show que la pareja presentó por seis años en la Royal Caribbean International, y los del Viejo Almacén; sin duda, la obra musical y danza a bordo de los cruceros, un espectáculo hollywoodense, les dejó un impacto perdurable. “En Oz estaban buscando un show internacional totalmente distinto y así fue como se entusiasmaron con nuestro proyecto, que cruza milongas con melodías de glorias del rock. Teníamos todo listo menos las fotos, que para cumplir con Oz tuvimos que hacer en un salón de baile, luchando para que nos instalen la luz a inicios de la cuarentena”, explicó Cristian.

En tiempos de distanciamiento social, Goldestein y Gallardo sueñan con poder volver a transmitir lo que más aman, el Tango. “El arte siempre sabe esperar”, afirman los directores de Tango Viva. No ven la hora de “poder volver a abrazarnos en un tango y poder llevar nuestro arte a cada rincón del planeta”.

¿Qué es OZ Productions?
La sede de OZP está en Londres y fue fundada en 1998. Ha presentado artistas líderes en 26 países y en los sitios más prestigiosos del mundo, tales como la Ópera de Sydney (Australia), Museo de Arte de Cleveland (EE.UU.), Palacio de Bellas Artes (Bruselas), The Esplanade (Singapur), Essen Philharmonie (Alemania), Sony Center for the Performing Arts (Toronto, Canadá), Place des Arts (Montreal, Canadá), Concertgebouw (Amsterdam, Holanda), National Music Centre (Tbilisi, Georgia) y en los festivales de Edimburgo, Hong Kong, Bangkok, Printemps des Arts de Montecarlo, Melbourne y Atenas, entre muchos otros.