Subastarán una obra de Tarsila do Amaral que estaba en manos de un implicado en el Lava Jato

La pintura “A capirinha”, considerada por la misma artista brasileña como la mejor obra que haya realizado, perteneció a un empresario que tiene con una deuda millonaria con 12 bancos.

“A capirinha”, una obra de la artista modernista Tarsila do Amaral, la principal exponente internacional del arte brasileño, será subastada el 17 de diciembre por más de nueve millones de dólares, tras una decisión judicial ya que el cuadro pertenecía a un empresario investigado por el caso Lava Jato, la famosa operación sobre la trama de corrupción en Brasil.

Según informó el diario El País, la pintura era propiedad del empresario Salim Taufic Schahin, investigado en el caso Lava Jato y con una deuda millonaria a 12 bancos. Por el litigio, fue un perito judicial quien estimó unos 47 millones de reales como precio estimativo de salida para la venta de “A capirinha” (1923), aunque como en toda subasta el precio lo pondrá el mejor postor. El dinero lo recibirá una cuenta del tribunal.

De acuerdo al diario español, hacía muchos años que “A capirinha no era expuesta en público porque su anterior dueño quería evitar llamar la atención sobre la valiosa obra. No estuvo en ninguna de las grandes muestras dedicadas a Tarsila en los últimos años por el Masp de São Paulo o el Moma”.

Tal como explicó la galerista Antonia Bergamin, la última obra de Tarsila “de ese calibre” que estuvo a la venta fue Abaporu, adquirida por el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires. Ahora será vendida a través de la casa de subastas Bolsa de Arte, de San Pablo.

Tarsila do Amaral nació en 1886 en la hacienda San Bernardo, municipio de Capivari, interior del estado de San Pablo, en donde tomó cursos de escultura y pintura y en donde conoció a la artista Anita Malfatti. Su ´perfeccionamiento continuó en París, en  1920, en la Academia Julian. Integró en su país el Grupo de los Cinco, junto a Mario de Andrade, Oswald de Andrade, Menotti del Picchia y Anita Malfatti. En 1923, nuevamente en París, frecuentó el taller de los cubistas André Lhote, Albert Gleizes y Fernand Léger.

En 1951 participó de la Primera Bienal de San Pablo y luego su obra se incluyó en las ediciones siguientes de esta misma bienal. En 1964 intervino en la Bienal de Venecia. Tarsila do Amaral murió en San Pablo en 1973

(Con información de Télam)