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Ana María Shua, Edgardo Cozarinsky, Félix Bruzzone, Vera Giaconi, Julián López y Gabriela Cabezón Cámara se reunirán hoy a las 20 hs en la sede de “Clásica y Moderna” para recordar a Natu Poblet

Creada en 1938 por el padre de Natu Poblet, la librería “Clásica y Moderna” , situada en Callao 892, funcionó  como vidriera de la mejor literatura -no sólo la histórica, la clásica, sino también la nueva, la de vanguardia, la moderna-, y las actividades culturales que allí se realizan, como espectáculos teatrales, lecturas, exposiciones de arte y bandas en vivo, hacen de ese lugar un punto de ebullición cultural en la Ciudad.

La consagración de la librería como referente literario y cultural, así como su reconocimiento como Bar notable, y el prestigio logrado entre escritores, lectores y personajes de la cultura, fue alcanzado gracias al trabajo y la gestión de Natu. Al igual que ella, este año Clásica y Moderna cumplió 79 años.

 

 

“Leer es un placer”, nombre del programa radial que condujo durante más de veinte años, es por ende el título ideal para homenajear a Natalia Asunción Poblet, la dueña de la librería Clásica y Moderna, un ámbito que ella convirtió en un espacio de hospitalidad y referencia de la cultura porteña.

Ana María Shua, Edgardo Cozarinsky, Félix Bruzzone, Vera Giaconi, Julián López y Gabriela Cabezón Cámara se reunirán hoy a las 20 hs en Callao 892 para recordar a la emblemática librera, que falleció en junio pasado.

“Natu fue la persona que me dio la bienvenida a la literatura argentina”, cuenta Shua. “Yo solía tomar cafecitos en Clásica y Moderna con ella y con su hermano Paco cuando todavía era solamente una librería. Natu fue siempre una especie de centro cultural ambulante. Querida por todos, única en su género y por lo tanto sin competencia con nadie, Natu era el nexo entre los escritores argentinos, y también entre los escritores y los artistas. Ella nos presentaba, nos relacionaba, nos invitaba, nos mimaba, nos leía”, expresó Ana María Shua en diálogo con Página 12.

“Para mí, Natu fue la constatación de que la alegría, el entusiasmo y la lucidez pueden llegar hasta el final de la vida”, agrega la escritora Gabriela Cabezón Cámara, otra de las tantas artista que pasaron por la emblematica librería y quienes entablaron amistad con la madrina de los libros.

Desde las 20 hs en la sede de Clásica y Moderna, ellos le rinden homenaje hoy, a quien se pasó la vida difudiéndolos.