Sandleris concurrirá antes del fin de año a explicar al Congreso la política monetaria

Desde el PRO, Nicolás Massot, confirmó que el presidente del Banco Central cumplirá, “como manda la ley”, con comparecer ante el Congreso, antes de fin de año.

El presidente del Banco Central, Guido Sandleris, comparecerá en el Congreso antes de fin de año, según confirmó el jefe del bloque de diputados del PRO, Nicolás Massot.

“El presidente del Banco Central va a venir, como manda la ley, en el marco de la comisión que corresponde, que es una comisión conjunta, que las componen las autoridades de las comisiones de Hacienda y Finanzas de ambas cámaras”, manifestó el legislador, en declaraciones a la prensa, al ingresar al Congreso para el debate en el recinto del proyecto del Presupuesto 2019.

Las variantes del PJ en el Congreso, el Frente Renovador, el Frente para la Victoria y el PJ Federal, requirieron la presencia de la máxima autoridad del Banco Central en el Congreso para explicar el programa monetario.

Aunque la oposición reclamó que Sandleris explicara su plan monetario durante la discusión del proyecto Presupuesto 2019 en la Cámara Baja, el funcionario no participó del debate. Incluso, el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara baja, el diputado nacional del PRO Luciano Laspina, había comprometido su presencia para el martes 9 de octubre. 

Massot confirmó hoy que Sandleris concurrirá “antes de fin de año” para comparecer ante diputados y senadores.

Sandleris asumió la presidencia del Banco Central el 25 de septiembre de 2018, tras la sorpresiva renuncia de Luis Caputo, mientras el equipo económico del Ministerio de Hacienda y el propio presidente de la Nación, Mauricio Macri, negociaban en Washington el segundo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), para ampliar el crédito stand-by.

Se trató del tercer cambio en la presidencia de la máxima entidad monetaria del país, durante la gestión de Macri y en el año. Desde el 4 de mayo, la política monetaria del Banco Central subió las tasas de interés a 60 por ciento y se desprendió de alrededor de 20.000 millones de dólares en reservas, para contener la escalada del dólar y la inflación.