Peña descartó cambios en el Gabinete y aseguró que no hay “un fracaso económico”

El jefe de Gabinete aclaró que todavía no está formalizado el acuerdo con el FMI por el anticipo de “todos los fondos necesarios”, anunciado ayer por Mauricio Macri.

El jefe de Gabinete, Macros Peña, descartó hoy cambios del equipo de gobierno. “No es la solución que está pensando el presidente”, afirmó.

“No estamos pensando en que haya una solución mágica por esa vía tampoco”, hay que seguir trabajando”, indicó el funcionario, en declaraciones radiales.

“No creemos que estemos ante un fracaso económico”, sostuvo Peña, luego de la estampida que sufrió ayer el dólar, tras el criticado anuncio del presidente, Mauricio Macri, que buscó llevar tranquilidad y confianza a los mercados.

“La Argentina saldrá fortalecida de este proceso porque tomamos las medidas necesarias para resolver los indicadores estructurales”, agregó.

El jefe de Gabinete aclaró que el acuerdo con el FMI anunciado ayer por Macri, en un mensaje previo a la apretura del mercado cambiario, es de “intención”. En este sentido, indicó que el gobierno está trabajando para avanzar en la letra chica del convenio para que el organismo adelante los “fondos necesarios” del préstamos stand by por 50.000 millones de dólares.

Más tarde, en un diálogo con periodistas tras su discurso en el Council of América, que se desarrolla en el hotel Alvear, explicó que la corrida cambiaria de los últimos días tiene que ver con “los problemas estructurales de la Argentina”.

“Nos dejan todavía con vulnerabilidades”, agregó.

En cuanto a la caída de la actividad económica, prevista en 1 por ciento para fin de año, el jefe de Gabinete sostuvo que “fue explicada, principalmente por la sequía y nos obliga a resolver más rápido nuestros desequilibrios estructurales”.

“Tenemos que resolver nuestros desajustes estructurales, principalmente reducir el déficit, la emisión del Banco Central, generar mayor competencia e inversión”, concluyó.

“Estos son momentos difíciles, pero útiles para recordar la perspectiva. Es bueno analizar en perspectiva cuál es el cambio que votaron los argentinos en noviembre de 2015”, dijo el funcionario al disertar en el Consejo de las Américas.

Peña dijo que siempre hubo una tensión, desde el inicio del gobierno de Mauricio Macri, dado que se planteó una discusión entre aquellos que creían que era un cambio de matiz y los que aseguraban que el cambio era de raíz.

“Estábamos en una Argentina que se había acostumbrado a ser una economía cerrada y una democracia débil y corrupta”, afirmó el funcionario ante unos 250 empresarios, antes de pedirles que confíen en el modelo económico que promueve Cambiemos.

Frente a los empresarios que participan del Council, Peña descartó que la política económica esté orientada a expandir el consumo interno.

“Algunos piensan que solo se puede crecer a partir del consumo, solución que no funcionó en ninguna economía del mundo, mucho menos en un momento de integración política y económica más importante de la humanidad”, afirmó.

El jefe de Gabinete recordó que el gobierno nacional ha enfrentado turbulencias como una sequía histórica, suba del petróleo, un cambio de contexto financiero y comercial mundial, sobre todo a partir de la tensión entre Estados Unidos Y China.

“Y eso dejó expuestas las vulnerabilidades de la Argentina”, dijo Peña. “Somos el país que más veces ha mentido y engañado al resto y que demuestra una y otra vez que no está dispuesto a buscar el equilibrio fiscal para depender de sus propios recursos”, explicó.

“Últimamente ocurrieron nuevas turbulencias que nos recuerdan que somos parte de un mundo, aunque haya un canto de sirena que nos dice que podemos resolver las cosas aislándonos del mundo. Surgió Turquía y sus problemas”, agregó Peña.

El funcionario afirmó que el gobierno está decidido a “eliminar la corrupción, promover la competencia y generar transparencia”.

“La llamada causa de los cuadernos nos trajo de vuelta, como un grito, la realidad de los problemas estructurales que debemos cambiar de raíz. La corrupción es una afrenta, una cachetada a los argentinos, principalmente a los que menos tienen. Eso nos generó más dudas, cuando los mercados nos exigen mayores certidumbres”, completó.

 

 

(Con información de NA)