Paloma Valdivia: “Los clásicos crean vínculos invisibles que atraviesan generaciones completas”

La ilustradora chilena, quien visita el país en el marco del Filbita, reflexionó sobre el poder de las imágenes y el dibujo.

La ilustradora y escritora chilena Paloma Valdivia visita el país en el marco del Filbita. El festival de literatura infantil se realiza en la ciudad de Buenos Aires hasta el día Domingo.

En una entrevista concedida a la agencia de noticias Télam aseguró que “la literatura para niños puede hablar de todos los temas, aunque siempre debería dejar una esperanza“.

Y agrega que “los niños tienen menos herramientas para procesar emociones. Por eso los problemas planteados deben tener alguna salida. Además es fundamental un mediador cuando el tema es muy complejo o doloroso y generar espacios de conversación

Su trabajo forma parte del White Ravens. Etiqueta que la Biblioteca Internacional de la Juventud otorga a libros que merecen atención mundial por su universalidad, estilo y diseño artístico y literario excepcional y a menudo innovador.

En el día de la fecha, la autora dará un taller de dibujo, a las 17.30 en el ChEla  (Iguazú 451, Ciudad de Buenos Aires), para chicos de cuatro años en adelante.

La ilustradora rememora sus primeros pasos en el mundo del dibujo y la ilustración. Recuerda los libros que le leía su mamá, como los cuentos de la colección Cuncuna, creada en el gobierno de Allende. “Todas las familias los teníamos porque eran vendidos en quioscos a precios económicos. Y por supuesto Mafalda. Gracias a Quino aprendí el concepto de viñeta y muchas palabras difíciles para un niño como democracia, jet set, economía mundial y plutocracia

Acerca del poder de las imágenes y los dibujos dice Valdivia: “son ventanas al mundo, transmiten información y emociones. Los niños se vinculan primero con las imágenes y luego, al leer solos, las recorren recordando las palabras y aprenden a articular las historias. Tienen el poder de atraer y encantar. Un buen dibujo es una entrada infalible a cualquier tema

Valdivia ha ilustrado clásicos como “Duerme negrito” o “Caperucita roja”, demostrando de esta manera, el valor que tienen éstos ante sus ojos.

Esos relatos se transforman en parte de la vida y en recuerdos poderosos porque están acompañados de situaciones, personas, lugares y tiempos pasados. Al reilustrarlos se mantienen vigentes y se tiene la posibilidad de presentar una nueva versión que va a depender de la época y sus muchas variantes. Los clásicos conectan las infancias de los niños actuales con los niños que ya fueron. Crean vínculos invisibles que atraviesan generaciones completas“.

{Télam}