Otro caso de acoso sexual sacude al Parlamento británico

Ivan Lewis, del Partido Laborista, fue denunciado por una mujer de haberla tocado tras un congreso partidario. A comienzos de noviembre, el ministro de Defensa de Theresa May renunció por acusaciones similares.

A tres semanas de la renuncia de un ministro por denuncias de acoso sexual, el principal partido de la oposición británica, el Laborismo, anunció hoy que suspendió a uno de sus diputados, Ivan Lewis, por acusaciones similares hasta que termine una investigación.

El partido liderado por Jeremy Corbyn aseguró que “se toma muy en serio las alegaciones de acoso sexual” e informó que Lewis está “actualmente suspendido” dentro del partido, por lo cual actuará durante la investigación en su contra como un diputado independiente.

En medio de una ola de denuncias que golpea tanto a oficialistas como a opositores en Reino Unido, una mujer denunció en la prensa que el diputado la había tocado e invitado a su casa hace siete años, cuando ella tenía 19, durante un congreso del Partido Laborista.

El diputado respondió que él nunca había tenido contactos o actitudes de naturaleza sexual “no consentidos” y luego echó mano a una fórmula muy utilizada por los hombres denunciados por mujeres en Londres y en otros países: pidió perdón si su comportamiento había hecho sentir incómodas a alguna de sus colegas.

Pese a que Lewis reconoció que invitó a salir a algunas de sus colegas y hasta desarrolló “fuertes sentimientos por ellas”, en un primer momento el Partido Laborista se limitó a anunciar una investigación.  Las críticas desde adentro de sus propias filas llevaron a la fuerza política a rever su posición y suspender al diputado de 50 años y padre de dos hijos mientras dure la investigación.

La suspensión partidaria de Lewis es apenas la última noticia en una seguidilla de denuncias, investigaciones y renuncias contra dirigentes políticos hombres por acoso o abuso sexual.

El primero de noviembre pasado el ministro de Defensa de Theresa May, Michael Fallon, se vio obligado a renunciar luego que las denuncias en su contra se acumularan en los medios.  Desde entonces, se multiplicaron las acusaciones contra parlamentarios de todos los partidos políticos británicos.

(Télam)