Nueva gestión

En un acto realizado en la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Enerc) asumió su cargo su nuevo rector el sonidista Carlos Abbate, y se dio comienzo al ciclo lectivo 2018

En un acto realizado en la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Enerc), dependiente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), asumió su cargo su nuevo rector el sonidista Carlos Abbate, y se dio comienzo al ciclo lectivo 2018.

El acto contó con la participación de docentes y alumnos así como autoridades del Incaa, su gerente general Juan García Aramburu y su gerente administrativo Nicolás Yocca, así como numerosos cineastas y técnicos del cine nacional que estuvieron allí para acompañar este día tan especial de la escuela nacional de cine.

 

 

Abbate fue el ganador de un concurso para ocupar el cargo, vacante desde mayo de 2017, un director de sonido que una trayectoria con obras dirigidas por cineastas como Eliseo Subiela, Sergio Renán, Juan José Campanella, Luis Puenzo o Marcelo Piñeyro, entre otros, premiado, con el Cóndor de Plata y docente de la Escuela de San Antonio de los Baños, en Cuba.

“La escuela tiene como misión tomar la posta y seguir adelante, mantener el nivel técnico que acredita en su historia y que se traduce en capacidades. Quiero que la escuela sea eso y también un lugar de la Industria”, señaló Abbate en diálogo con Telam.

En cuanto al atravesamiento tecnológico el flamante rector aseguró que “en general todos los que trabajamos hace rato nos hemos ido actualizando. Le agradezco al sistema analógico del que fui parte porque aprendí mucho de una metodología de trabajo que después apliqué con otras herramientas, pero no es lo único que se modificó en estos estos tiempos ya que también es necesario hacer hincapié en cuestiones de lenguaje, de lo que significa la audiovisual, de lo amplio que es”.

“Como lenguaje en la historia de los hombres el cine es joven y por eso mismo tiene mucho por delante todavía. Todo el tiempo cuando se ven obras nuevas siempre hay algo que tiene que ver con la manera de contar. Creo que estamos viviendo un momento de cambios privilegiado”, evaluó.

Con respecto al plan presentado a concurso para su postulación como rector de la Enerc, Abbate aseguró que “la idea es cumplirlo por completo. Es amplio y son solamente cuatro años. Tengo que saber aprovechar este tiempo”.

“Vengo del campo del cine donde todo se hace para ayer, y acá todo es mucho más grande, con mucha más gente involucrada, pero así y todo creo que vamos a poder sentar las bases, avanzar sobre el territorio que tiene que ver con la excelencia académica y la posibilidad de perfeccionamiento de los técnicos que están trabajando así como darle también mucha importancia a la federalización del cine”, dijo.

En cuanto a las sedes que la Enerc tiene en el interior del país asegura: “Queremos sedes que no sean vistas como escuelitas sino como puntos de referencia en el interior y al mismo tiempo escuchar sus voces, que empiecen a contar sus propias historias con su propia voz. Esa me parece que es una asignatura pendiente que debemos aprobar”.

Con respecto a los cambios que se vienen dando en los últimos tiempos asegura que “la tecnología democratiza el cine pero a la vez fuerza a tener un mayor respeto por la forma en que se usa y para qué se usa.”

“Todas las personas que somos un poco más grandes y que estamos en la industria, cuando hablamos decimos que somos cineastas dedicados a distintas funciones técnicas pero lo que nos mueve siempre es el cine. Es muy importante que ese mensaje le llegue a los alumnos, que les podamos dar herramientas para que sepan que no es sólo una cuestión de apretar botones”, precisó.

Abbate es consciente del momento coyuntural que se vive en la enseñanza de cine: “Es bueno que la gente formada en lo analógico y qué pasó a lo digital transmita sus propias experiencias para para alimentar a las nuevas generaciones. Esto ha pasado en todas las profesiones y siempre se aprenden muchas cosas de los que nos preceden. Creo que hay que sembrar nuestro capital de trabajo en gente para la nueva industria”, concluyó.