Un mural de Bansky, que muestra la figura de un niño blandiendo un lápiz como espada, fue tapado con pintura blanca en la ciudad inglesa de Hull, norte de Inglaterra, luego de que un concejal del Partido Conservador de la misma ciudad pidiera “limpiarlo”. La orden despertó una rápida reacción del gobierno de esa localidad, que hoy mismo ordenó repararlo.
El genial y polémico grafitero publicó ayer en su cuenta oficial de Instagram, dos imágenes de la nueva obra, que ha pintado sobre el muro de un puente en desuso. El concejal que ordenó taparlo, consideró que no se trataba de una obra de “verdadero arte”, según la agencia EFE.
El gobierno de Hull señaló hoy en un comunicado que enviarán a especialistas al lugar para que apliquen “una capa protectora sobre la obra de arte de Banksy”, a fin de “prevenir mayores daños, una medida temporal para asegurarse que los ciudadanos continúen disfrutando de su trabajo”.
Entre el día de ayer, cuando el mural fue tapado, y esta mañana, antes de la reacción del gobierno de Hull, un limpiador de ventanas local, Jason Fanthorpe, comenzó a restaurar con agua y alcohol parte del grafiti atribuido a uno de los artistas callejeros mejor valuados del mercado de arte, de quien se desconoce su identidad.
“Podés amarlo u odiarlo, pero Banksy ha hecho un regalo a la ciudad con su arte. No podía quedarme sentado sin hacer nada”, dijo Fanthorpe a la emisora de radio local de la BBC.
Por su parte, la cuenta oficial en Instagram de Banksy, cuyas obras suelen alcanzar en las subastas cientos de miles de libras, publicó viernes varias fotografías del grafiti que apareció en un puente en desuso de Hull, para confirmar su autoría.
La pintura levantó polémica en el Reino Unido después de que el concejal del Partido Conservador John Abbott pidiera “limpiar” la pintura, informó la agencia española de noticias EFE.
“Creo que se debería sacar una fotografía (del mural) y conservarla. Pero comparar a Banksy con, por ejemplo, el verdadero arte que se puede ver en la Ferens Art Gallery, que en ocasiones es completamente fascinante, es juzgar las cosas desde estándares distintos”, dijo el concejal a la BBC.
Es interesante pensar cómo estos hechos, reabren y actualizan el debate por la necesidad de establecer por dentro o por fuera del “canon” artístico a las obras callejeras; cuánto de valor hay, hoy por hoy, en un artista que surgió siendo perseguido por el soporte elegido (la calles, las paredes, consideradas hasta ahora, en algunos países, como una forma de expresión ilegal) y por el fuerte contenido crítico hacia la política en sus obras, y cuanto de esto hoy se revaloriza en términos de lo que significa que una de las paredes de la ciudad, tenga una obra suya inscrita en sus calles.
(Con información de Télam)
