La CGT y empresarios acordaron un bono de fin año

Tras el encuentro mediado por el gobierno nacional, la CGT, la UIA, la CAC y CAME acordaron un bono de 5.000 pesos. Todavía no está cerrado, pero podría hacer desistir a la central sindical de un paro.

La propuesta que avanza con más posibilidades, entre los reclamos de la CGT, es la de conseguir un bono de fin de año para paliar la pérdida del poder adquisitivo de los salarios formales frente a la inflación de 2018, que se estima arriba de 40 por ciento.

Las autoridades de la CGT y representantes de la Unión Industrial Argentina (UIA), la Cámara Argentina de la Construcción (CAC) y la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) fueron convocados por el ministro de la Producción, Dante Sica, y el secretario de Trabajo, Jorge Triaca.

Los empresarios y la conducción de la central obrera analizaron el pago de un bono de 5.000 pesos en dos cuotas para los trabajadores del sector privado y público: uno de 2.500 pesos en noviembre y otro de igual monto en enero de 2019.

“Fue una muy buena reunión, se avanzó bastante en ver la posibilidad de un bono que recomponga parcialmente el salario de los trabajadores”, indicó el presidente de la CAC, Gustavo Weiss.

Empresarios y CGT acordaron volver a reunirse en los próximos días para terminar de definir la implementación del bono de fin de año.

El encuentro se produjo mientras la central obrera, que conducen Héctor Dáer y Carlos Acuña, decide si avanza en otro paro general antes de fin año, después del que realizó el 25 de septiembre último.

“El paro no está declarado. Sí es una de las posibilidades que existe si no tenemos posibilidad de llegar a un acuerdo o paliativos para atravesar esta situación de crisis”, manifestó Dáer, a la salida del encuentro, en declaraciones a la prensa. “Nosotros tenemos que cubrir el poder adquisitivo y parar la caída de la actividad económica inyectando dinero al consumo. Han caído las ventas y el consumo y esto es lo que ha generado este círculo vicioso”, explicó.

El encuentro entre gobierno, empresarios y sindicatos se llevó a cabo a las 13 en la sede del gremio trabajadores de la Sanidad, que conduce Dáer.

La CGT también reclama reapertura de paritarias y un “convenio antidespidos”, aunque esta alternativa fue rechazada por el gobierno de Mauricio Macri en ocasiones anteriores.