Con múltiples protestas en la calle y un paro docente nacional, el Senado debate esta tarde la reforma previsional, junto a los proyectos de Consenso fiscal y Responsabilidad fiscal.
El oficialismo avanzará en la aprobación de una de las iniciativas del paquete impulsado por la gestión de Mauricio Macri en lo fiscal, en lo laboral y en lo previsional.
El proyecto original sobre movilidad jubilatoria fue modificado la semana pasada, con la propuesta del senador del PJ Miguel Ángel Pichetto.
El senador Guillermo Pereyra adelantó su rechazo al tratamiento conjunto de los proyectos y pedirá que sean tratados por separado. Por otro lado, advirtió que desde la Comisión de Trabajo no planean tratar la reforma laboral en sesiones extraordinarias.
“Como representantes de las provincias, ninguno puede estar en desacuerdo con el Consenso Fiscal alcanzado por los gobernadores, pero incluir entre estos temas la Reforma Previsional va a traer inconvenientes”, explicó. “Sabemos que hay otros sectores que están reclamando participar, así que va a ser muy difícil que se pueda aprobar este año”, advirtió el senador del Movimiento Popular Neuquino.
Por otro lado, el también secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas privado adelantó su rechazo a la ley de reforma previsional porque reducirá en 4 por ciento anual la actualización de las jubilaciones. “La movilidad jubilatoria actual lleva a que los jubilados tengan un aumento de casi el 28 por ciento en 2017, pero con el nuevo sistema, el aumento sería de alrededor del 23 por ciento”, explicó.
El senador advirtió sobre el “apuro en el oficialismo” para tratar temas “muy importantes y sensibles para la sociedad”.
El senador nacional del Frente para la Victoria Ruperto Godoy también anticipó su voto en contra en la reforma previsional.
“El ahorro que se planea desde el Ejecutivo va a reducir el ingreso de un sector postergado. El gobierno va ahorrar 100.000 millones de pesos, que implica una disminución sustancial de los haberes”, sostuvo el senador por San Juan, en diálogo con Diario Vivo.
Según la estimación de Godoy, en marzo próximo, con la fórmula actual, las jubilaciones se actualizarían un 12 por ciento. Con la que propone el gobierno y el PJ, recibirían un aumento de 5,07 por ciento.
Por otro lado, el ajuste sería trimestral, pero quedará un semestre atrasado. Además de la modificación de la fórmula de movilidad, el proyecto de reforma previsional prevé equiparar al 82 por ciento del salario mínimo, vital y móvil las jubilaciones mínimas para los que cumplieron con 30 años de aprotes. “Los que se jubilaron con la moratoria no tendrán ese beneficio”, aclaró Godoy.
Diputados:
Si entre hoy y mañana se aprueba la reforma previsional en el Senado, después deberá ser debatida en la Cámara de Diputados. El proyecto llegaría al recinto ya cerrado el período de sesiones ordinarias de este año, que concluye el 30 de noviembre.
En la Cámara Baja, el Frente Renovador, el GEN y el Frente para la Victoria ya manifestaron su rechazo al proyecto oficial.
Para el GEN, el proyecto de reforma previsional es “un atraso fenomenal en el poder adquisitivo de los jubilados”. Desde el espacio liderado por Margarita Stolbizer estiman que la nueva fórmula de movilidad provocará una pérdida promedio de un sueldo por año en la jubilaciones.
“Si se toma en cuenta que se espera que el gas aumente un 70 por ciento en 2018 y que los haberes jubilatorios no superarán un incremento del 14 por ciento, queda bien clara la desconsideración del gobierno con quienes aportaron durante toda su vida”, sostuvo Juan Carlos Juárez, especialista en temas previsionales del GEN.
Según Juárez, lo que el Estado ahorrará en jubilaciones “constituye el doble de lo que ha gastado para reparación histórica, dado que pagó 64 mil millones de pesos y va a ajustar más de 120 mil millones”.
