El mundo de las letras llora a Juan Martini

El escritor rosarino falleció a la edad de 75 años

El mundo de las letras ha sido golpeado con una nueva pérdida. Con “tristeza” y “dolor” despidió en el día de ayer al escritor rosarino Juan Martini, quien falleció en la ciudad de Buenos Aires el día 28 de abril a la edad de 75 años en la ciudad de Buenos Aires.

El legado de este escritor rosarino nacido en 1944 para la literatura argentina ha sido muy importante. No sólo ha escrito emblemáticas obras como “La vida entera”, “Composición de lugar” y “La construcción del héroe”, entre muchas otras sino que durante sus años en el exilio, se destacó como editor de la mítica casa editorial Bruguera.

Además, ha fundado la revista literaria Setecientosmonos, junto con Carlos Schork. Esta publicación periódica incluía poemas, cuentos y críticas literarias y se consolidaría como referencia ineludible de las Revistas literarias del país. Tuvo su último número en el año 1968

Martini ha recibido numerosos premios y menciones especiales. Entre ellos se destacan la Mención Casa de las Américas que recibió en 1977; el mismo año, recibiría también el Premio de Novela Ciudad de Barbastro. Ya en la década del 80, recibiría la Beca de la Fundación Guggenheim y el Primer Premio Municipal de Literatura. En 1991, ganaría el Premio Boris Vian.

El autor rosarino es recordado por su gran y carismático personaje Juan Minelli, quien protagonizó alguna de sus novelas.

Otro de sus trabajos destacados es la trilogía “Cine”, publicada por Eterna Cadencia, se alzaría como sus últimos trabajos publicados.

El escritor tuvo el honor de ser prologado por el inigualable Julio Cortázar quien definió a sus ficciones como aquellas que llevan al lector “de la anécdota al vértigo

Al igual que en tantos sueños que se inician dentro de un clima y de un territorio perfectamente realistas para resbalar poco a poco hacia otras dimensiones donde todo es posible y aceptable -escribía Cortázar en ese 1981-, mi lectura me fue llevando de las secuencias habituales a los enlaces insólitos, de la anécdota al vértigo“.

Como en la vida de cualquier escritor, la escritura se convitrió para Marini en parte constitutiva de su vida. Su legado no se olvidará puesto que el autor vive en sus obras y publicaciones; su legado de Rosario para el mundo