El buque de Ocean Infinity vuelve a Sudáfrica

Luego de recuperar el último dispositivo sumergible autónomo que continuaba en operación, la embarcación partió de la zona en la que fueron localizados los restos del submarino, tras operar operar durante 70 días en aguas de la Argentina.

El buque “Seabed Constructor”, perteneciente a la empresa estadounidense Ocean Infinity, abandonó el área de búsqueda del ARA San Juan tras haber concretado el hallazgo del submarino a 900 metros de profundidad, y partió con rumbo hacia Sudáfrica, informaron fuentes de la Armada.

El barco noruego empleado en las tareas que permitieron localizar la nave de guerra argentina, desaparecida desde el 15 de noviembre de 2017 con sus 44 tripulantes, puso rumbo hacia Ciudad del Cabo cerca de las 19 del sábado, y según explicaron la travesía demandará 12 días.

Los tres familiares de los tripulantes que se desempeñaron como veedores continuaban a bordo y descenderán del buque al llegar al puerto de Ciudad del Cabo, informó a Télam uno de ellos.
Fuentes de la Armada señalaron en tanto que lo mismo sucederá con los tres observadores destacadas en la unidad por parte de la fuerza.

“Los observadores y los familiares veedores desembarcarán en esa ciudad y, con apoyo de la Agregaduría Naval Argentina en Sudáfrica, de la Embajada y del Ministerio de Defensa, serán trasladados de regreso a nuestro país”, informaron desde la fuerza.

En cuanto a la información aportada por la empresa a partir del hallazgo, fuentes cercanas a la investigación que lleva adelante la jueza federal Marta Yáñez, en la localidad santacruceña de Caleta Olivia, señalaron que “con las imágenes” suministradas de los restos del San Juan sobre el lecho marino “cumplieron el contrato”.
Otras imágenes se incorporarán a la causa en los próximos días, según explicaron.

La empresa Ocean Infinity estuvo a cargo de la búsqueda del submarino desde el 6 de septiembre último, luego de resultar ganadora de la contratación urgente impulsada en ese sentido por el Ministerio de Defensa, a través de la Armada, compulsa en la que participaron otras ocho firmas.

El “Seabed Constructor” es un buque de bandera noruega, de 115 metros de eslora y 22 de manga, y contó con el despliegue de cinco vehículos subacuáticos autónomos (AUV) capaces de operar hasta 6 mil metros de profundidad, a una velocidad de exploración de 1200 kilómetros por día, y dos vehículos operados remotamente (ROV), que permitieron concretar el hallazgo del San Juan.