Dudas y sospechas por la extraña muerte de un periodista ruso

El hombre, de 32 años, había publicado una investigación sobre el funcionamiento y accionar de los mercenarios rusos en Siria.

Un periodista ruso que investigaba las muertes de mercenarios de su país en Siria murió anoche por las heridas sufridas al caer desde el balcón del quinto piso de su departamento, y si bien las autoridades investigan el caso como un suicidio, sus compañeros descreen de esa hipótesis.

Maxim Borodin, de 32 años, falleció anoche en el hospital, tras el incidente que ocurrió el pasado jueves, informó el portal de noticias Novy Den, en el cual trabajaba el periodista. La editora de Borodin en Novy Den, Polina Rumyantseva, dijo ayer que no cree que se haya suicidado, informó el diario digital Business Insider.

En ese sentido, la cadena CNN informó que no estaba claro cómo cayó Borodin y la radio estadounidense Free Europe-Radio Liberty (Rferl) informó que la policía consideró que su muerte fue un suicidio.

Por su parte, Reporteros sin Fronteras (RSF) tuiteó hoy que las circunstancias de la muerte de Borodin eran “sospechosas” y que quieren “una investigación exhaustiva e imparcial”.

Borodin, quien investigaba el crimen organizado y la corrupción, publicó en marzo último una investigación sobre la muerte de mercenarios rusos del grupo Wagner de Asbest, que fueron asesinados en Siria durante una pelea con una milicia siria entrenada y equipada por Estados Unidos en febrero.

El Grupo Wagner tiene alrededor de 2.500 mercenarios en Siria, según la cadena BBC, y es supuestamente financiado por Yevgeny Prigozhin, reseñó la agencia de noticias ANSA.  Prigozhin fue acusado por Estados Unidos en febrero pasado de financiar “la fábrica de trolls” (perturbadores de Internet) dedicada a tratar de influir en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016 que acabó con el ajustado triunfo de Donald Trump.

(Télam)