Cordera: “Ni soy un genio ni soy un malvado”

El ex Bersuit afirmó que hizo una “descripción desafortunada” cuando, en una conferencia, dijo que “hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo”.

Hace tres años, Gustavo Cordera pronunciaba una oración que le provocó un repudio generalizado. “Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo”, dijo el ex Bersuit, en una entrevista con estudiantes de periodismo de Tea Arte.

Después de aquella declaración, al cantante le cancelaron los shows que tenía en agenda, algunas radios dejaron de pasar sus temas y prácticamente desapareció de la escena pública. Sus dichos también Terminaron en la Justicia, tras una denuncia del INADI.

Ahora, el artista dio una entrevista al programa Basta de todo (Metro FM 95.1), en donde dijo sentirse “muy aliviado” y le restó importancia a lo sucedido. “Después del episodio lamentable en mi vida, en un principio lamentable, porque hoy mirándolo en perspectiva creo que fue perfecto lo que sucedió”, expresó. Y agregó: “No hice nada, solo hice una descripción desafortunada, no es punible. La justicia tenía que hacer algo políticamente correcto a todo lo que se generó”.

Consultado sobre las frases que pronunció aquel 8 de agosto de 2016, Cordera explicó: “Yo hice una descripción en la que creo, pero que no voy a repetir para no lastimar a nadie”. Luego, aseguró que la difusión de sus comentarios en la entrevista tuvo unas segundas intenciones. “Fui de onda, no sabía que me estaban esperando gente que me la tenía jurada. Al ser editado suena horrible. Al no tener la grabación de esa charla, tardé 40 días para saber lo que había sucedido, un tiempo muy largo para defenderme de una condena social. Por eso no salí nunca a defenderme. Y tampoco lo estoy haciendo ahora. He cometido muchos errores en mi vida, y los seguiré cometiendo porque es la única manera que tengo de crecer”, afirmó.

Cordera también contó cómo fueron los días posteriores a la publicación de sus dichos. “La mirada pasó a ser condenatoria. Era tan horrible para mí el afuera, que el único lugar que me quedó para estar fue adentro mío. Por primera vez en mi vida me miré para adentro”, dijo el músico.

“No solo me bajaron shows, sino también estaba el miedo al escrache. Ahora eso terminó. Inclusive la gente se dio cuenta de que fue exagerado, muy exagerado, demasiado exagerado. Recibir una condena mucho antes que la justicia te examine… Fui una persona totalmente examinada. Durante tres años no tuve ninguna denuncia”, añadió.

Preguntado sobre su presente, el cantante afirmó: “Ahora lo más importante es mi consciencia. De verdad no me importa lo que le pasa al otro. El otro también tiene que hacerse cargo de su mirada. Yo como artista, como tantos otros, soy como una pantalla donde la gente proyecta lo que tiene adentro. Proyecta lo lindo, pero también lo jodido y oscuro que tiene adentro. Por eso no puedo hacer nada. Ni soy un genio ni soy un malvado, soy sencillamente un ser humano”.