La Sala I de la Cámara Federal confirmó el procesamiento de la ex presidenta y actual senadora de Unidad Ciudadana Cristina Fernández y de sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner, por lavado de dinero a través del alquiler de plazas hoteleras de la firma Hotesur. De esta manera, la ex mandataria quedó al borde del juicio oral.
En el mismo fallo, los camaristas Pablo Bertuzzi, Mariano Llorens y Leopoldo Bruglia confirmaron los embargos de 800 millones de pesos a todos los procesados.
En la misma causa, están procesados el dueño de Austral Construcciones, Lázaro Báez; su hijo, Martín Báez; el contador de la familia Kirchner Víctor Manzanares; la sobrina de la ex presidenta, Romina Mercado, y Osvaldo Sanfelice, que administraba los negocios inmobiliarios de la familia.
La hipótesis que se investiga indica que la empresa Valle Mitre, de los Báez, figura como acreedora en la compra de los hoteles de la familia Kirchner y como locataria de sus habitaciones. Se investiga si el circuito cerraba una especie de “retorno” de fondos provenientes de la adjudicación de obras públicas.
“Sin contar con capacidad económica ni experiencia en el rubro, administró el hotel Alto Calafate y la hostería Las Dunas -propiedad de la familia Kirchner-y abonó mensualmente en concepto de cánones locativos, sumas de dinero que finalmente se introdujeron en el patrimonio de aquellos, todo con miras a ocultar la fuente real de los fondos y a otorgarles apariencia de lícitos”, indica el fallo”.
La semana pasada, el juez federal Julián Ercolini elevó a juicio oral y público la denominada causa “Los Sauces”, en la que la Cristina Fernández, sus hijos y Báez, entre otros, están procesados por lavado de activos.
(Con información de NA)
